Ahorita Tía Margarita, mañana te amargará...

La frase que da título a este escrito era usada por mi abuelita cada que le decía que tenía novia… me daba un chingo de risa porque pensaba “otra vez me va a chingar, nunca le gustan mis novias, seguro quiere que me vuelva puto” y no, mi abuelita no quería que me volviera puto, solo quería que no la cagara tanto y que no sufriera por causa de algunas féminas. Nunca he tenido una relación amorosa con hombres pero si les digo que los quiero, porque eso hacen los amigos para el demostrar cariño… Pero el punto no es mi relación con los hombres.

Lo que sí puedo decirles es que TODAS las mujeres con las que me he relacionado sentimentalmente (y las que no) utilizan frases del tipo: “Pues con qué clase de mujeres sales”, “eres muy guapo”, ¿Acaso eres un extraterrestre? (esta siempre me da risa), “eres lo mejor me pudo pasar en la vida”,  “que manos tan grandes tienes, (y luego le dicen lo mismo a otros acerca de las manos, es obvio que los hombres tenemos las manos más grandes que las mujeres, no sé porque no se inventan algo mas ingenioso), otras dicen, “gracias por aparecer en mi vida” y bla bla bla. A algunos les parece romántico dedicar Every Breath You Take de The Police, sin saber que esa canción habla de un wey que espía a su mujer… En una relación amorosa las personas son como los borrachos, se encuentran en estado inconveniente y por lo tanto nunca le debes creer a alguien que está enamorado, jamás.

Resulta que cuando estas iniciando una relación amorosa eres todo lo bueno que se le pueda ocurrir a la pareja en turno, eres amable, cariñoso y hasta guapo. Sin embargo, con el paso del tiempo eso va cambiando, te vas poniendo panzón, (porque cenas alitas y dejas de hacer ejercicio) vas dejando a tus amigos, te alejas de las cosas que te gustan, dejas de ir a echar la chela con los compas, prefieres ir a la birria y hacer todo lo que te dice tu amorcito con tal de despertar empiernado. (Lo que hace uno por no estar solo).

En fin… al principio todo es maravilloso, todo es hermoso, la vida es bella, los pajaritos revolotean hermosos en el bosque (aunque te caguen la mano te parece hermoso), todo lo puedo si estoy a tu lado piensas, pero después, viene un cheque de realidad cuando te das cuenta de que antes de conocer a esa persona súper especial ya vivías, hacías cosas, respirabas, trabajabas, (aplican restricciones), hacías lo mismo de siempre, sin embargo con tal de creerte la mentira piensas que esa persona vino a revolucionar tu vida, cuando se vaya volverás a ser la misma cagada.

Según un estudio realizado por científicos de la Universidad del Valle de México reveló que el amor dura tres años, aunque no creo que eso sea cierto, seguramente lo sacaron del libro de Frederic Beigbeder porque dudo mucho que hayan investigado algo los muy huevones, seguramente andaban en las Muertotas de Villa Coapa o haciendo “bendiciones” en los hoteles del Tlalpan.

Hay quienes dicen que el amor “debe” durar toda la vida, otros dicen que el amor dura lo que dura dura (seguro son regetoneros, pinches idiotas) sin embargo pienso que esto del amor anda medio distorsionado y más sobre su duración, como si estuviéramos hablando de un embarazo o la siembra de maíz.

Cuando andas enamorando o te enamoran es común escuchar frases del tipo: “el amor todo lo puede”, “por amor se puede tal o cual cosa”, “el amor todo lo cura” y un sinfín de mamadas más, como ya lo dije en otras ocasiones, de amor no vive el hombre y mucho menos la mujer... Sobre todo las que están acostumbradas a viajar, a vestir y a comer caro a cambio de una cogidita por un anciano o un casado; las mujeres no siempre quieren lo que dicen que quieren, hoy te pueden amar mucho y mañana les vales verga (también aplica para muchos hombres), ellas pueden llorar durante tres años si así lo desean y (los hombres no), si les dices alguna pendejada y les haces un chiste y se ríen y luego siguen llorando, ya lo dice François de la Rochefoucauld, la duración de nuestras pasiones depende tan poco de nosotros como la duración de nuestra vida”.

 No obstante eso, la gente decide tener fe y enamorarse, el amor lo conciben como un “acto de fe” y digo, cada quien sus drogas pero no mamen.

Pasado algún tiempo y cuando algo ya no funciona, viene el amargamiento, los reclamos, al final ni eras tan maravilloso, ni tan guapo, ni tan buena persona, es más… ahora resulta que tienes el pito chico, y después de ser un extraterrestre te conviertes en el incómodo, el innombrable o hasta en “el perro que me stalkea”, en fin, jamás entenderé eso.

Lo que sí creo es que la gente debería terminar sus relaciones amorosas sin tanto rollo, hablando y sin necesidad de insultar, sin usar sus redes sociales para llamar la atención y que alguien les quiera porque andan sufriendo, como extraño aquellos tiempos en donde si sufrías te tenías que chingar tu solito y te tenías que revolcar en tu miseria no que ahora, apenas públicas “mi ex me dejo” y ya tienes miles de likes y comentarios de apoyo y de insultos hacia el susodicho, sin saber que te dejó por infiel, por culera o por algo que tenía que ser así.

Coman frutas y verduras… Nos leemos la próxima.